¿Qué puede hacer por mi empresa un abogado financiero?
Los administradores de una empresa tienen perfectamente claro que la gestión financiera es clave para la viabilidad de un negocio. En su principio es simple, ingresar más de lo que se gasta; pero se complica con la necesidad de buscar la mayor eficiencia posible de los recursos.
La búsqueda de financiación externa para un nuevo proyecto, o la gestión de pagos y cobros de la operativa diaria, son actividades clave del departamento financiero en cualquier negocio grande o pequeño.
En muchos casos esas actividades exigen de la empresa que se relacione con otras organizaciones, en especial con bancos y entidades de crédito, pero también con clientes y proveedores.
Un abogado, especializado en el mercado financiero puede aportar muchas ventajas a cualquier empresa ayudando a maximizar el beneficio procedente de esas operaciones.
Entre otras cosas un abogado financiero realizará el mejor análisis financiero posible de tu negocio y en base a eso trabajará en el día a día con previsiones de gastos, previsiones de tesorería, e incluso con la gestión de cobros.
Además, gracias a su conocimiento del mercado, será un gran apoyo en la búsqueda de financiación; te puede ayudar a seleccionar las mejores opciones disponibles, las que más se adecuen a la situación de la empresa, así como a negociar las mejores condiciones para conseguir que esa financiación sea lo menos costosa para la empresa.
En casos de un momento crítico en una empresa un abogado financiero puede trabajar en la reestructuración y refinanciación de deuda gestionando la negociación y elaboración de los distintos instrumentos en los que se articulan dichas reestructuraciones, para poder adecuar la estructura económico-financiera y patrimonial de la empresa.
En Fraile Abogados tenemos una gran experiencia en derecho financiero por lo que podemos ayudarte en:
Evaluación financiera ROA / ROE
Asesoramiento en la búsqueda de financiación
Gestión de cobros
Defensa ante entidades financieras
Relación con entidades bancarias (líneas de crédito, descuentos de pagarés, etc.)
